La Caja China abrió sus puertas en la primavera de 1999, en el barrio sevillano del Arenal, una zona de Sevilla, céntrica y cercana al río, que se remonta al siglo XIX a consecuencia de la actividad del puerto. De ahí que en el barrio haya edificios de esa época que se caracterizan por ser casas de viviendas cuya planta baja se dedicaba a talleres o almacenes. El dato merece citarse porque la galería escoge precisamente una planta baja de esas características que, por su altura y transparencia, es especialmente adecuada para su función. La acertada restauración y la ampliación de las instalaciones con un almacén anexo completan la competencia del local de la galería.