Antiguo palacio construido por Alfonso XI en el siglo XIV, y convertido posteriormente en monasterio por deseo de Pedro I.
Considerado como uno de los mejores ejemplares del arte mudéjar de Castilla y León.
Se visitan distintas estancias de gran interés arquitectónico y decorativo, como la Capilla Mudéjar, Patio árabe, Capilla Dorada, Refectorio, Patio El Vergel, Antecoro, Coro Largo, Iglesia, Capilla de los Saldaña.
Contiene colecciones de pintura, escultura y mobiliario. Destacan en otros, un retablo con pinturas atribuidas a Nicolás Francés, el órgano realejo que se cree perteneció a la reina Juana I (La Loca) y la magnifica techumbre dorada del presbiterio, obra maestra del mudejarismo castellano.